Cuando se trata de conseguir seguridad en la Industria
Alimentaria, uno de los elementos a tener en cuenta es la detección de gases.
Un gas puede ser la fuente de alimentación de muchos de
los dispositivos que funcionan en una instalación industrial.
En el mismo proceso productivo también pueden intervenir
gases tóxicos como parte de las materias primas necesarias o bien como residuos
provenientes de la transformación.
Conseguir detectar a tiempo una fuga es importante desde
el punto de vista de la seguridad laboral e industrial.
Dentro de la prevención de riesgos laborales de los
empleados, conocer los riesgos que suponen las instalaciones de gas y conseguir
los medios adecuados para tener una protección suficiente es clave. Pero cuando
hablamos de seguridad es tan importante la protección como la prevención. Y tanto
es así que, como bien se sabe, todo lo que se invierte en prevención supone un
ahorro virtual de costes. Una realidad que cuesta verla pero por la que todos
estamos dispuestos a impedir que se convierta en real.
Una simple inspección de un silo de almacenaje, de una
instalación de depuración de aguas, de un quemador generador de calor puede ser
controlada, desde el punto de vista de detección de gas, con un simple equipo
portátil. Ascendiendo en la escala de complejidad de los sistemas industriales,
un grupo de aparatos fijos puede ser la alternativa. Todo depende del caso
particular de cada empresa.
Satisfacer las necesidades de prevención es, por tanto,
un logro en el campo de la fugas de gases. Pensar en la instalación de un
sistema de detección puede ser una buena solución pero a la hora de invertir
hay que tener en cuenta tanto el coste de los equipos como su mantenimiento.
Por eso hay empresas que se dedican a alquilar y mantener aparatos de detección
de gas como se puede ver aquí