EL ASURADO



Como dice el refrán "Hasta el rabo, todo es toro". Así pasa en el cultivo de cereales, sobre  todo, en los de secano.
El periodo desde la nascencia hasta el espigado puede haber sido excelente, con buenas temperaturas y humedad adecuada, pero falta el granado y el secado. Y es entonces cuando puede ocurrir el asurado, un fenómeno que deja las semillas a medio grano, produciendo pérdidas considerables de cosecha por el bajo peso específico.
¿En qué consiste el asurado?
El asurado o golpe de calor se ocasiona cuando coinciden temperaturas elevadas con vientos secos. Esto provoca un aumento de transpiración de la planta de forma que las raíces son incapaces de suministrar el agua necesaria para compensar la evapotranspiración. El grano que se está formando sufre entonces una detención en el proceso y se arruga.
El periodo crítico en los cereales de invierno es el que va desde la formación del grano hasta la madurez cérea.
Según algunos autores, como Azzi en Fitotecnia General de Diehl, a partir de 28ºC, con viento seco, se produce el asurado, incluso en regadío y en suelos con humedad suficiente, viniendo a demostrar que la falta de agua no es el causante principal sino la descompensación fisiológica.

Más información en Tratado de Fitotecnia General
Un vídeo de la Politécnica de Valencia que explica el ciclo de los cereales, incluido el periodo de madurez lechosa, pastosa y cérea, se puede ver aquí debajo:




Vídeo de centeno en el periodo de secado del grano: